Mamá pulpa

Para los que no entiendan el título, les hago un resumen... En un comercial de un aromatizante de habitaciones sale una pulpa diciendo que ella casi no tiene tiempo de hacer nada (mientras hace varias tareas con cada brazo) y que el aromatizante la relaja al menos un momento, bla bla...

Bueno, pues esta semana y la anterior he andado de mamá pulpa, claro, mi relajante no es un absurdo aromatizante, si acaso será el tiempo que platico con mi marido y con mis amigos, leo blogs, hago cosas que no me ponen a pensar en todas las tareas que hay por hacer.

Por trabajo mi marido ya no puede ayudar tanto en la casa como antes simplemente porque no está el mismo tiempo que estaba antes en casa... Así que, ya que soy la que pasa más tiempo aquí me he convertido en malabarista de tareas domésticas.

Ya antes me había tocado organizar la casa, pero sin tener trabajo en la tarde e hija que fuera a la escuela...

Para aquellos que todavía tienen la arcaica idea de que hacer quehaceres no es 'nada', ah, qué gusto me daría que UNA semana hicieran todo lo que hacemos a veces las mujeres...

Y caray, a quien les llama 'mandilones' a los maridos que ayudan, la verdad, pobrecitos... No saben que cooperar en la casa es algo que las mujeres agradecemos (aunque no parezca) día a día y que nos hace quererlos más por ese simple hecho.

Bueno, luego de esos dos filosóficos párrafos, lo único que me queda decir es: ¡Help! No, no es cierto... Lo que sí es que necesito dormir porque mañana comienza otra loca semana de días que no alcanzan y de prisas en todo momento... En fin, me servirá de entrenamiento, para qué, no sé, pero de entrenamiento, jejeje...