J'apprends français

¡Ahora sí estoy aprendiendo francés! Siempre he sido fan de esta lengua y ahora gracias al bendito Internet (y luego le preguntan a uno por qué es medio adicta a este medio) puedo oir, escribir, leer y practicar francés (digo, por si un día de verdad nos vamos a Canadá, son puntos extra).

El sitio que más me ha gustado es LiveMocha.com. Te permite aprender cómo se escribe y pronuncian frases en francés, luego leer estas frases y relacionarlas con una imagen, escuchar y señalar la imagen adecuada, acomodar frases de manera correcta, escribir sin ayuda frases de acuerdo lo aprendido y por último hablar (grabar) un texto que te ponen. Además, como hay gente del idioma que uno estudia aprendiendo español, hay quien te revisa los textos y ve si hay algo que dijiste mal.

 

La verdad está padre. A ver qué tal voy avanzando en mi intento.

El día a día

Hoy me di cuenta que ya caí en la rutina del día a día, la que a veces parece que no deja nada permanente.

Esta es la primera vez que estoy verdaderamente sin actividades extrahogar (porque vaya que hay actividades hogareñas en esta casa, aunque sea mega pequeña).

Antes que esto, cuando me quedé en casa, me tocó tener un negocio en el que nos repartíamos mi marido y yo el tiempo de estar ahí y tener todo en orden. Es decir, no estaba en casa de tiempo completo.

Ahora pues mis actividades son de índole más privada, menos con resultados visibles para el mundo exterior, porque definitivamente también tengo retos y resuelvo cosas al estar en casa: tener el lugar limpio, las cosas arregladas, un orden para que todo funcione, resolver que haya comida, ponerles un horario a Michelle y próximamente a Leonardo, tenerla entretenida, a gusto, resolver sus dudas, educarla minuto a minuto, ayudarle con sus tareas. Todo esto requiere energía física y mental, aunque algunos que no se enfrentan a ello crean que es 'fácil'.

Pero creo que caí en la rutina... Digo, sigo leyendo libros, revistas, periódicos, sigo reflexionando, creando mi propia opinón, intentando mantener la mente activa pero actividades externas pues no. Y estoy buscando desesperadamente qué hacer, algo que me permita atender bien a Michelle y al mismo tiempo realizarme en alguna forma, no sé, algo que me permita resolver problemas que impacten a otros.

Algo se me tiene que ocurrir, porque aparte que nunca me ha gustado estar sin proyecto, creo que puedo aportarle algo al mundo, aunque sea en una cosa pequeña... Ya llegará la inspiración.

Acontecimientos

Pues ahora sí no hay marcha atrás, mi mareado ya es Master... :) Sí, este martes (ayer, pues) hizo su examen de grado :) Obviamente, lo aprobaron. Luego de, veamos, 8 años que empezó la maestría, una pausa medio obligatoria de 4 años casi por motivos familiares (desde que nos casamos prácticamente, luego de que nos enteramos que venía Mich en camino) y ¡terminó! La verdad, perseveró y lo hizo y estoy orgullosa de él.



Ya le podemos decir Maestro en Ciencias, uy. Para el evento vinieron sus papás y hermana Deyanira de Celaya. También estuvo el novio de Deyanira que vive cerca de Tula, Hidalgo, y quien nos dio ray hasta la escuela de mi marido (que está en el profundo sur del D.F.) ¡Qué trayecto, así o más perdidos, jajaja!

Y pues fue emocionante. Claro, por lo especializado de su maestría (reconocimiento de texturas vía matemáticas, en resumen) pues no entendí mucho, jejeje, pero en general me parece que lo hizo muy bien.

Por eso, entre preparativos para su examen (porque hubo que comprar vino y otras cositas para el brindis posterior), casi no he posteado por acá.

Han sido días (desde Halloween) en que ha habido mucho que hacer... Para comenzar, comenzamos a tirar papeles inútiles que la verdad nos ponían en aprietos a la hora de buscar un papel necesario (típica ley de Murphy: cuanto más necesitas x cosa, encuentras 20 que en otro momento te interesarían, pero en ese instante no, argh).

Además, en ratos salimos a pasear... El fin de semana anterior a éste llevamos a patinar a Michelle. Se ve botanísima con sus patines, casco, rodilleras y coderas y patinando como patizamba, jajaja, es decir, con las piernas abiertas hacia afuera jajaja. No les puedo poner la grabación de ese momento, que sí hay, porque aún no encuentro un editor de video que gire la imagen, la cual tomé de lado porque de otra forma no cabían ella y su altísimo papá ayudándole, jejeje.

Luego, mi marido, que la verdad es un amor, jejeje, me cumplió el gusto de ir por unas tortas ahogadas este sábado pasado acá por Naucalpan. Riquísimas, buenísimas, si quieren saber dónde están y andan en Naucalpan, visiten su página en Ahogadas El Hospicio. La cuestión es que como no tenemos auto, pues tuvimos que hacer tour en autobuses, jejeje... Tres, para ser exacta. Luego, caminar unas cuadras y por último regresar en un trayecto de dos horas (porque estaba el tráfico de loooocos por ser el puente del 20 de noviembre, fecha festiva acá en México). Y él con gripa, la verdad se vio lindo... :)

Otra cosa buena: ¡ya tenemos cable! Y es que en televisión abierta nada más hay tonteras, de veras, nada siquiera levemente coherente o entretenido.

Ahorita Michelle está ida con uno de sus programas favoritos (Lazy Town). A veeeer si me quiere soltar la tele al rato, jajaja... Pero si no quiere, la hago querer, jajaja... :)

Aparte, si tengo tiempo para postear es porque estoy descansando, ya que en estos momentos ando con un gripón terrible, el cansancio del embarazo y dolores de que parece que se me está acomodando la cadera y músculos aledaños, auch.

En resumen, eso es lo que ha pasado estos días... A ver si ya nos la tomamos con más calmita... Aunque no, ahorita que pienso hay kermesse mañana para mi hija, chanclas... Y tengo que hacer 25 gelatinas, así que cuál calma, jajaja... En fin, así es esto...

Sueños en el horizonte

Es curioso cómo, en ciertas épocas de la vida, uno recuerda todo aquello que soñó hacer en su niñez.

En mi caso eran tres cosas principalmente: dedicarme a escribir (ser escritora de tiempo completo o periodista), aprender idiomas y viajar mucho.

Actualmente he hecho a medias (por diferentes circunstancias) estas cosas, pero como ahorita tengo tiempo de sobra creo que voy a volver a tomar esas ideas y desarrollarlas.

Lo de los viajes no sé si lo pueda cumplir a corto plazo... Al menos ya fui a República Dominicana (con mi marido, de recién casada) pero yo espero poder ir a tantos lugares que he soñado, quizá a Francia, a Canadá, a Japón, ya veremos...

Lo de los idiomas, pues estoy intentando aprender francés autodidacta, ya me prestaron libros y me van a prestar más..

Lo de escribir, aunque lo hago de forma informal, empezaré a idear algo más en firme... A ver qué se me ocurre... :) Deseenme suerte. Quizá si todo va bien me vuelva una especie de Isabel Allende, jejeje (no aspiro a ser Cervantes ni Shakespeare, jajaja, algo más sencillito está bien).

Sí se pudo, sí se pudo

Y no, ésta no es porra populachera para algún chafa equipo de futbol nacional o la inestable Selección Nacional, ni consigna de partido político o de manifestación, noooooo...

Esto es un testimonio de que cuando se quiere se puede. Mi marido acaba de obtener la aprobación de su examen de maestría, es decir, ya es Master... :) Ya no sólo va a decir Ing. delante de su nombre en sus tarjetas de presentación o curriculum... Y esto luego de un buen, un buen de dificultades, retrasos, relajos, complicaciones técnicas, complicaciones embaraziles, jajaja, en fin... :)

¡Felicidades, amor! Yo sabía que lo ibas a lograr desde que te decidiste a venir al DF a volver a intentarlo. Un poquito más de 8 meses después aquí estamos, ahora sí que como dice Dora La Exploradora: "¡Lo hiciste!" (perdón, pero la puso Michelle y ya me contaminó el cerebro, jajaja).

Ahora sí, ni duda que el que persevera alcanza.

Suerte y tranquilidad

Parece que este segundo bebé sí trajo, como dicen coloquialmente, torta bajo el brazo... :) Aunque de repente nos agarró un poco 'desencanchados' porque traemos ciertos proyectos, planes y todo el movimiento que implica, definitivamente no se compara con la forma en que viví mi primer embarazo.

Me encantaba trabajar, la bronca era que estar embarazada y llevar el horario de 10 horas (o hasta 14 a veces) del periódico en el que estaba no era precisamente fácil estando cansada, con naúseas, tos de embarazo (sí, a mí me agarra tos cuando me embarazao) y demás molestias, además de intentar concentrarme en mantenerme relajada y sin broncas en la cabeza para que Michelle se desarrollara a gusto (¡cuánta responsabilidad le achacan a la mamá, de veras!)

Afortunadamente en este caso la cosa cambia. Aunque aún tengo responsabilidades (mantener caminando las cuestiones de la casa para que facilitarnos la existencia a Arturo y a mí, ver que Michelle tenga lo necesario, vaya a la escuela, haga sus tareas, etc.) definitivamente no es lo mismo que en el caso de Michelle.

Para empezar, no tengo a la presión de personas externas para cumplir con x proyectos u objetivos, yo me doy mis tiempos, a veces algunas cosas influyen en que tenga que hacer x o y actividad, pero la mayoría de las veces si acaso la que se presiona soy yo.

Además, me siento bastante apoyada por Arturo, por mis amigos y amigas, familia, etc., tanto que a veces hasta rara me siento, jajaja...

Y además, parece que la suerte nos está sonriendo últimamente (no cuento completo porque primero queremos ver las cosas en concreto), pero es bueno que todo camine por fin en la dirección que tanto tiempo hemos querido. ¿Qué más se puede pedir? Realmente no queda más que estar agradecida...

Permanent vacation

Ya me cansé de estas 'vacaciones permanentes'... Es decir, no quiero volver a un trabajo como el que tenía antes (que me ocupaba más de la mitad del día, no me permitía ver a Michelle lo suficiente como para verdaderamente sentirme que soy su mamá, brr, nada más de pensarlo me da escalofrío).

No, lo que quiero es una actividad que me permita ganar dinero de forma independiente, usar de ser posible todas mis habilidades a su máximo y de forma creativa y establecer mi horario por mí misma (no quiero nada, ¿no?).

Por ahora como que eso de levantarse, ver la casa, tenerla limpia pues tiene una efímera, muy efímera satisfacción (dura tanto como permanezca limpia la casa, lo cual es como 30 segundos después que se despierta Michelle y mi marido, jajajaja).

No, ya en serio, yo no minimizo para nada el trabajo que las mujeres que se quedan en casa hacen, principalmente porque son las responsables de tener todo lo que necesitan los que salen a trabajar para que éstos ni por la cabeza les pase si hay comida, ropa limpia, si están en un lugar cómodo, aseado, los pequeños cuidados y limpios, etc.

Pero no quiero dedicar todo mi día y toda mi vida a esto que es un bregar diario y del cual no queda nada permanente...



Quiero algo que diga que contribuí en algo a la sociedad, aunque sea en una cosa muy focalizada en mi entorno más cercano, pero que lo vea otra persona que no sea yo...

En fin, que a ver qué sale de este auto exhorto a moverme... Esperemos que todo salga bien...

La vida es una tómbola 2

Parece ser que lo que, en su momento, en el post que tenía como título "La Vida es una tómbola" parecía mala suerte ahora es algo que no salió bien de modo que se pudiera aprovechar otra oportunidad.

Creo que esta vez la oportunidad no se irá de las manos y podremos aprovecharla como familia.

Pero lo más importante de esto es ver que tenemos a nuestro alrededor gente que nos apoya y nos echa la mano si hay problemas.

Ojalá pronto podamos corresponder a ese apoyo al doble, al triple o más.

Por el momento, una de las cosas padres que no están en 'veremos' y que ya van a pasar es que voy a visitar mi tierra... :) Por fiiiin... :)

Extraño mi tierra, su olor, sus paisajes, su comida, y lo más importante, mi gente... Mis amigos, mi familia...

Así que pronto voy por fin, luego de que no saliera el anterior intento de viaje, a verlos...

Un poco de optimismo

Hoy, a un día de que se termine el año, creo que, si nos mantenemos en nuestro empeño, las cosas pueden mejorar.

No digo que hagamos los típicos deseos de Año Nuevo que nunca cumplimos, sino que día a día tratemos de estar conscientes de qué cosas están bien, pero más que nada, qué cosas no van tan bien y podemos mejorarlas a nivel personal. Si el resto del mundo no se quiere mover, es su problema, pero poco a poco salir de lo mismo.

Tal vez tomar las cosas con un poco más de ligereza y las que sí merecen la pena meterlas en nuestro sistema.

Bueno, yo espero que para todos, amigos, incluso enemigos, el año les pinte bien. Para los amigos, porque han sido una lucecita que ayuda a mantener el rumbo a pesar de que de repente todo parezca oscurecer alrededor. Para los enemigos porque siempre he pensado que si esas personas que te molestan constantemente están contentas quizá dejen de notarte y mantenerse en sus propios asuntos, jejeje.

En fin, como para dejar un poco de esa idea les dejo esta canción que me encontré por ahí, que me gustó porque te anima.