Claro, mi "secuestro" y dieta es en 99.9 por ciento culpa mía, jejeje...
En el caso de la dieta, digamos que después de tener a Michelle quedé con unos kilos de más... Luego, un trabajo de escritorio no ayudó mucho y mucho menos la falta de voluntad para bajar lo que se acumuló... Y ya cuando estaba preparando mi plan para hacer algo al respecto, zas... El embarazo de nuevo...
Entonces, mi doctor me puso a dieta de conejo (ensaladas, verduras, no fruta, no carbohidratos, no dulces), porque no quiere que me dé diabetes gestacional o preclampsia (y yo tan dulcera, panera y come frutas que soy... :( Caray, mejor come el perro, jajaja).
Y pues lo del secuestro me refiero a que con eso de que hay acá nueva habitante (sí, Spotty) pues me la paso en la casa limpiando a todas horas... Si no limpio lo que hace Spotty, limpio el relajo que deja mi hija, si no, el que se acumula por usar una casa y demás (trastes, camas, a mí misma luego de limpiar todo, jejeje)
Por eso ni he pisado por aquí en unas semanitas... También por eso no he ido a ningún blog de los que siempre visito a dejar comentario (ni al de mi marido). Entonces como que estoy pero no estoy, jejeje... :) Ya mañana lo bueno que vamos a la excursión al D.F. (a ver a mi doctor, pero bueno, es excursión) y voy a ver más calles que las que veo cuando voy por Michelle y a su escuela y de regreso).
Y hablando de ese par (Michelle y Spotty) nada más para que vean la vida que se dan las condenadas mientras una se parte la espalda, jajaja... :)
Reflexiones al calor de un café veracruzano / Thoughts I have while taking a coffee (from Veracruz)
viernes, enero 25, 2008
miércoles, enero 09, 2008
¡Qué comodidad!
Es impresionante que un cachorro se acomode donde caiga y ahí se pueda echar su siesta en cuestión de segundos...
De veras que qué suerte, porque la sope (o sea yo, jajaja) que la recogió en un impulso de lástima no ha parado todo el día, jajaja...
Para empezar mi "bellísimo" gato (le digo así para no decirle una palabra no precisamente elegante) estuvo mega inquieto desde que se dio cuenta que había, ¡oh, catástrofe!, un perro en la casa.
Como duerme a nuestros pies, le dejé la puerta del cuarto entreabierta. Gran error... La perrita durmió abajo, en una carriola de juguete de Michelle y el gato por supuesto la olió toda la noche y toda la noche nos estuvo 'avisando' a brincos que estaba ahí... Liiiindo...
Así, dormí 6 malas horas anoche...Cuando necesito mínimo nueve o me siento como golpeada... Pero pensé 'cuando se vaya Michelle a la escuela duermo dos horas'. Craso error... Como si los 4 o 5 meses de construcción y polvo en la casa que está a la izquierda de donde vivo no fueran suficientes, ahora en la casa de la derecha también están cosntruyendo y golpeando y como comparto una gran pared, por supuesto, no pude dormir. :(
Luego, entre limpiar el patio de atrás, poner periódicos, limpiar las 'cositas' que hizo mientras limpiaba el patio y darle de comer me pasé un rato de la mañana. En ir arriba y descubrir que el maldito gato se vomitó en dos de mis cobijas y ensució un poco el colchón y tener que limpiarlo, otro rato. En hacer dos veces comida (porque la primera carne que puse a cocer me parece que no soportó la congelada-descongelada) otro rato.
Total, que compensar no he podido, pero ¡quéee satisfactorio es ver que otros descansan! (nótese la ironía)...
martes, enero 08, 2008
¡Qué perra suerte!
Pues bien, luego de fiestas y más fiestas (incluido el día de Reyes, en el que Arturo y yo tuvimos la suerte de sacar 3 monos de la Rosca -dos yo, uno él- y luego él otro mono en la Rosca de su trabajo) pues ya se normalizó de nuevo la rutina.
O más bien, se había normalizado hasta ayer. Hoy veníamos Michelle y yo de regreso de su escuela y de repente en la calle, tratando de subirse al camellón, vemos una mancha blanca y negra. Era un perrito que al parecer o alguien perdió o lo dejó a su suerte. Tan chiquito estaba el perro que no podía subirse al camellón (y no mide más de 15 cms).
De repente, el cachorro, en lugar de quedarse donde estaba, se le ocurre regresar a la calle, y venía una camioneta de esas Jeep Cherokee... por centímetros la libró... Se quedó quieto justo a poca distancia de las dos ruedas del lado derecho.
Para mi mala suerte tengo corazón de pollo y no pude soportar que los carros atropellaran al dichoso animalillo y como si fuera yo oficial de Tránsito le hice el alto al siguiente auto y fui y rescaté al perro, mientras Michelle se quedaba en la banqueta sentada.
Michelle (obviamente) rápido lo agarró y lo cargó para la casa... Mientras, yo volteaba a todos lados en caso de que hubiera alguien que buscara al dichoso perro... y nada...
Total, que ahorita tenemos involuntariamente una 'mascota' extra en la casa. Lo bañé, ya le dimos comida y agua (con la cual se atragantó prácticamente del hambre que tenía) y va a tener que 'vivir' en el patio en lo que vemos qué hacemos con él... ¿Alguien sabe de algún albergue en Izcalli donde los regalen (no los maten) o alguien que quiera un perro al parecer pitbull (es la raza a la que más creo que se le parece)?
Aquí una foto del perrillo:
Lo más chistoso del día, la frase de mi marido sobre el perro:
UPDATE: No había tenido ni chance ni ganas de estar averiguando, pero ya vimos que es niña, jejeje, por el momento (temporalmente) se llamará Spotty, jejeje... Así le puso Michelle...
O más bien, se había normalizado hasta ayer. Hoy veníamos Michelle y yo de regreso de su escuela y de repente en la calle, tratando de subirse al camellón, vemos una mancha blanca y negra. Era un perrito que al parecer o alguien perdió o lo dejó a su suerte. Tan chiquito estaba el perro que no podía subirse al camellón (y no mide más de 15 cms).
De repente, el cachorro, en lugar de quedarse donde estaba, se le ocurre regresar a la calle, y venía una camioneta de esas Jeep Cherokee... por centímetros la libró... Se quedó quieto justo a poca distancia de las dos ruedas del lado derecho.
Para mi mala suerte tengo corazón de pollo y no pude soportar que los carros atropellaran al dichoso animalillo y como si fuera yo oficial de Tránsito le hice el alto al siguiente auto y fui y rescaté al perro, mientras Michelle se quedaba en la banqueta sentada.
Michelle (obviamente) rápido lo agarró y lo cargó para la casa... Mientras, yo volteaba a todos lados en caso de que hubiera alguien que buscara al dichoso perro... y nada...
Total, que ahorita tenemos involuntariamente una 'mascota' extra en la casa. Lo bañé, ya le dimos comida y agua (con la cual se atragantó prácticamente del hambre que tenía) y va a tener que 'vivir' en el patio en lo que vemos qué hacemos con él... ¿Alguien sabe de algún albergue en Izcalli donde los regalen (no los maten) o alguien que quiera un perro al parecer pitbull (es la raza a la que más creo que se le parece)?
Aquí una foto del perrillo:
Lo más chistoso del día, la frase de mi marido sobre el perro:
Oye, ya somos seis, nada más falta el perico
UPDATE: No había tenido ni chance ni ganas de estar averiguando, pero ya vimos que es niña, jejeje, por el momento (temporalmente) se llamará Spotty, jejeje... Así le puso Michelle...
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